julio 31, 2020

Relatos de una ex flaca.

Relato 1.

¿ Les pasó alguna vez de ver una foto vieja y pensar "¡ Qué flaca que estaba ! " ? De repente te vez en el espejo y notas rollos que antes no estaban, la cara más rellenita, los brazos más anchos, la cintura que desaparece, y te preguntas qué fue lo que pasó. A mí me pasó.
De chica siempre fui muy flaca, "piernas de tero" me decía mi hermana. Recién en mi adolescencia comencé a "subir un poco de peso " aunque lo que pasaba realmente era que mis curvas de mujer comenzaban a aparecer. Seguía siendo flaca pero con una forma diferente. Esto no significaba que fuera malo, simplemente estaba cambiando, ya no era la chica de las piernas de tero.

Todo lo relacionado con nuestra estética y principalmente nuestro peso siempre genera mucha presión. Hoy en día miro hacia atrás y me doy cuenta que yo realmente estaba flaca, miro fotos y me duele saber que aunque me veía delgada, a veces demasiado, yo me sentía gorda.

Ahora mismo sí estoy gorda, más de lo normal, está vez sí. Lo noté principalmente hace unas semanas atrás al salir de la ducha. Quise secarme y me agite al hacerlo. Y no es cuestión de la edad. Aunque suene gracioso me preocupé y después me molesté porque no pude valorar y apreciar a esa chica que años a tras estaba flaca pero creía que no. Podría echarle la culta a la sociedad y los estereotipos que lograban que no me sintiera satisfecha con mi cuerpo. Echarle la  culpa a alguien más siempre es más fácil, pero la realidad es que yo soy la única responsable de cómo me veo y siento. Y si hoy en día estoy gorda no tiene que ver con algo externo sino con todo lo que yo hice o no. El comer bien o mal es responsabilidad mía, el hacer ejercicio o no es responsabilidad mía, el dormir bien o no es responsabilidad mía, lo que consumo en las redes es responsabilidad mía. Así que lejos de sentirme mal decidí escribir. Por supuesto que me gustaría verme diferente, o como estaba antes, pero en vez de no comer, como lo he hecho en alguna ocasión, preferí escribir. Y no solamente por y para mí sino para ustedes, para todos aquellos que lean y se sientan en la misma posición que yo, o que en algún momento les haya pasado.

Este es el primer escrito de una serie de relatos que compartiré con ustedes. Espero poder expresar con claridad cada sensación, cada decisión que vaya a tomar, cada reflexión. Y que puedan ver que me abro ante ustedes natural, real y sincera. ¿Me acompañan?


julio 06, 2020

Angustia


Hoy me desperté angustiada. Tuve un sueño. En mi sueño estaba mi hermano menor y un personaje de una serie que me gusta mucho. Es la segunda vez que sueño con este personaje. De hecho es la segunda vez que sueño dentro de la misma semana, eso me parece raro. En el sueño él y yo éramos amigos que se estaban por convertir en algo más, esto el sueño no lo decía pero se percibía. Es esa sensación que a veces se producen en los sueños, en donde la persona que está soñando sabe lo que sucede aunque sean cosas que salgan de la normalidad. Esta situación se salía completamente de mi normalidad, primero porque estoy de novia y segundo porque él es un personaje de ficción.


Estábamos en una habitación,en un lugar que no reconocí, mi hermano ya estaba ahí y este personaje y yo recién llegábamos. Todo iba muy bien y parecía un buen sueño. Pero en un momento dije algo, algo que me arrepentí de decir. Digo que me arrepentí porque eso que dije transformó por completo el lindo momento que pasábamos a un momento incómodo y triste en donde este personaje estaba enojado conmigo y yo me sentía mal y culpable. Parecía una discusión, como si yo hubiera dicho algo que le daba a él la certeza de que yo era de cierta manera y no iba a cambiar. Lo feo de eso es que esa imagen no era linda. Yo trataba de arreglarlo y de hablar con él, muy arrepentida por lo que había dicho, pero él se había puesto a jugar a la play con mi hermano mientras contestaba todo lo que yo intentaba aclarar en la “discusión”. Este personaje decía que yo era una mala persona.

Esto siguió así un rato. 


 En un momento mi hermano y yo salimos de la habitación y yo le rogaba a mi hermano que le hablara bien de mi, que lo convenciera de que yo era buena. Mi hermano no decía nada. En ese momento recordé que yo estaba peleada con mi hermano y me puse a pensar “ yo no puedo convencerlo para que este bien conmigo, no lo puedo obligar si él no quiere” . Fue en ese momento cuando entonces me di por vencida. Volví a la habitación y busqué mis cosas para irme. Por dentro pensaba que quizá si él me veía hacer eso iba a ceder y se iban a arreglar las cosas. Pero no lo hizo, me miró y yo desperté en ese momento.


 Me acuerdo esa última mirada y pude leer lo que me estaba diciendo. No quería estar enojado conmigo, y lamentaba que las cosas fueran así. Pero le molestaba principalmente haber confirmado que yo era de “cierta” manera. Es como cuando queres mucho a alguien pero te das cuenta que hay cosas que no te aportan nada saludable y te da bronca que sea así porque tenes que dejar ir a la persona.

 Me desperté muy triste y enseguida empecé a recordar lo que había soñado y lo uní a distintas cosas. Por un lado, reconocí ese sentimiento de culpa y de arrepentirme de lo que había dicho o hecho. Ese Sentimiento lo experimenté mucho en mi primer año de novia con el chico con el que estoy actualmente. También pensé en aquellas cosas que últimamente estoy haciendo que quizá hacen que me sienta una “mala persona”. 
A la vez estaba confundida en los personajes que aparecían en mi sueño. No entendía porque ellos, ni porque me afectaba tanto la opinión o la situación de esa persona. Todavía creo que no lo entiendo muy bien. 

 Los lunes a la mañana tengo clases de zoom con mis alumnos, así que no tuve tiempo para reflexionar mucho y ponerme mal. Simplemente hice una oración y me levanté para prepararme. Creí que ya estaba mejor pero tuve todos los inconvenientes técnicos para conectarme, no se escuchaba el audio, no se veía la imagen. Y para colmo de todo le grité a mi novio. Eso me hizo sentir mucho peor. Él me quiso ayudar y yo reaccioné de la peor manera.
Obviamente cambie mi chip y di la clase con mucho amor y alegría, salió todo muy bien. Pero apenas termine me invadió esa tristeza nuevamente.

 Fue por eso que me puse a escribir, y mientras, hubieron varias interpretaciones que pude darle a este sueño para intentar descifrar por qué me siento de esta manera. 
La primera tiene que ver con esto que yo decía. Me acuerdo muy bien muchos momentos en los que decir lo que yo pensaba me ocasionó problemas, principalmente estando de novia. Y no en todos los casos tenía que ver con algo que yo haya dicho o hecho que estuviera mal. Pienso en cómo me sentía, saber que lo que podía decir tenía que ver con parte de mi personalidad. De una personalidad no aceptada, no tanto por los demás sino principalmente por mí. Creo que esa es una de las cosas que más me sensibiliza. La aceptación a mi misma con errores y todo no es fácil, a veces me avergüenza y no me gusta. La culpa en esos momentos me invade rápidamente. 

 Lo otro que pensé fue en esto de la relación con mi hermano. Hay algo ahí que está sin resolver, y no porque yo no quiera, pero es difícil y complicado. Aún así el no estar en “paz” con esa persona o situación puede generar mucha sensibilidad.

 Cuando comencé a escribir,lloré, literal. No entendía por qué. Simplemente fue un sueño. Pero yo le presto mucha atención a los sueños, siempre trato de revisar si significan algo o no. Y este me pareció uno de esos que significan algo. 
Puede que haya querido significar muchas cosas, es algo que tendré que seguir reflexionando. Pero de las conclusiones que saqué hasta ahora me quedo con la primera, esto de la voz y de las cosas que digo, y las que no digo también. Y también qué pasa con esas cosas que oculto y las que me animo a decir pero que no termino aceptando. Incluso las que oculto, las oculto de mí misma.
Creo que hay algo referido a la aceptación que tengo que trabajar. De hecho ya lo estuve haciendo pero por alguna razón volvió a surgir ahora. No es malo. Doloroso, seguramente. Pero es importante y positivo reflexionar sobre nosotros mismos e intentar ser la mejor versión que podamos.